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Juan 10:10. Verso Juan 10:10. _SINO PARA ROBAR, MATAR Y DESTRUIR..._. Los que entran en el sacerdocio para disfrutar de las rentas de la Iglesia, son los más bajos y viles ladrones y asesinos. Su conducta impía es una trampa para los simples, y la ocasión de mucho escándalo para la causa de Cristo.
10 El ladrón no viene sino para hurtar, y matar, y destruir [las ovejas]; yo he venido para que tengan vida, y para que [la] tengan en abundancia. 11 YO SOY el buen pastor; el buen pastor su alma da por [sus] ovejas. 12 Mas el asalariado, y que no es pastor, de quien no son propias las ovejas, ve al lobo que viene, y deja las ovejas, y huye, y ...
Juan 10:10. Juan 10:10. I. El don del Espíritu de vida habita en aquellos que están unidos a Cristo en una plenitud más abundante que nunca antes se había revelado. Y el don de la vida no es un poder, un principio, sino una Persona muy verdadera que habita en nosotros. Ésta es la regeneración por la que todos los siglos esperaron hasta ...
Reina-Valera 1909 con números de Strong. 1 DE cierto, de cierto os digo: El que no entra por la puerta en el corral de las ovejas, mas sube por otra parte, el tal es ladrón y robador. 2 Mas el que entra por la puerta, el pastor de las ovejas es. 3 A éste abre el portero, y las ovejas oyen su voz: y á sus ovejas llama por nombre, y las saca ...
S. Juan 10:10 RVR1960. El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia. RVR1960: Biblia Reina Valera 1960. Compartir. Lee S. Juan 10. La Biblia App La Biblia App para Niños. Verse Images for S. Juan 10:10
8 Todos los que vinieron antes que yo eran ladrones y bandidos, pero las verdaderas ovejas no los escucharon. 9 Yo soy la puerta; los que entren a través de mí serán salvos. Entrarán y saldrán libremente y encontrarán buenos pastos. 10 El propósito del ladrón es robar y matar y destruir; mi propósito es darles una vida plena y abundante.
S. Juan 10:27-29 RVR1960. Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano. Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre.